En general, con la vida que llevamos nos resulta difícil estar en silencio, porque cuando lo intentamos comienzan a aparecer ruidos, pensamientos, inquietudes, dudas, preocupaciones, ansiedad, etc. Estos ruidos internos siempre estarán, como seres humanos no podemos dejar de pensar pero lo que sí podemos hacer es observar nuestros pensamientos, dejarlos fluir, tranquilizarnos y buscar la quietud, la calma y el silencio interior, aunque sea sólo unos minutos al día.
Todo esto es muy importante porque nos ayudará a reducir el estrés y a estar más equilibrados. Los niños de hoy muchas veces viven en una vorágine y necesitan relajarse, principalmente los niños que viven en las grandes ciudades. Estos momentos son muy lindos para que los adultos compartamos con los niños, son momentos meditativos. Básicamente, la meditación se trata de eso, de momentos de quietud, observación y presencia. Es muy beneficioso enseñar a los niños la práctica de la meditación, a continuación